Ni promiscua ni cornuda (tengo papiloma), es el primer libro de la periodista Consuelo Silva Dagorret y nuestra invitada de hoy.
En esta novela, basada en la experiencia real de la autora, Consuelo relata la historia de una mujer que, al cumplir 40 años y a propósito de una cirugía estética, comienza a realizarse exámenes médicos y se encuentra con una desagradable sorpresa: el resultado de su Papanicolaou arroja la presencia de una lesión precancerosa producida por el VPH: virus papiloma humano.
«Los prejuicios sociales y la carga que tiene una enfermedad venérea son muy fuertes, más aún en un país conservador como el nuestro, y eso provoca una barrera importante a la hora de prevenir», opina Consuelo. «Por otro lado, hay un tema de género implícito en esto, no se categoriza de la misma manera a una mujer que tiene VPH que a un hombre, y me encantaría que esto comenzara a cambiar».
¿Qué es el Virus del Papiloma Humano (VPH)?
VPH significa “virus del papiloma humano”. Es la infección sexualmente transmitida más común que existe. Por lo general, el VPH es inofensivo y desaparece espontáneamente, pero algunos tipos pueden provocar verrugas genitales o cáncer.
Los virus del papiloma humano (VPH) son un grupo de virus relacionados entre sí. Pueden causar verrugas en diferentes partes del cuerpo. Existen más de 200 tipos. Cerca de 40 de ellos afectan a los genitales. Estos se propagan a través del contacto sexual con una persona infectada. También se pueden propagar a través de otro contacto íntimo de piel a piel.
El cuerpo de la mayoría de las mujeres es capaz de combatir la infección de VPH. Pero algunas veces, el virus conduce a un cáncer. Las mujeres que tienen mayor riesgo son las que fuman, las que han tenido muchos hijos, las que han utilizado pastillas anticonceptivas por mucho tiempo o las que tienen una infección por VIH.
En nuestra conversación de hoy hablaremos sobre los mitos de este virus que en Chile es la sexta causa de muerte por cáncer en mujeres, sin embargo, en mujeres jóvenes, entre 15 y 44 años, es la segunda causa de muerte.